Se han levantado los «bloqueos de seguridad de los gatillos» del ejército de Pyongyang, advirtió la hermana de Kim Jong-un
DIARIOPAISRD.COM-NOTICIA INTERNACIONAL. (AFP-RT) Pyongyang está dispuesto a responder con la fuerza a cualquier “error de cálculo tonto” por parte de Seúl, ha dicho Kim Yo-jong, la influyente hermana del líder norcoreano Kim Jong-un.
El viernes, Seúl anunció que estaba evacuando la isla Yeonpyeong después de que Corea del Norte disparara 200 proyectiles de artillería frente a la costa occidental. Dijo que los proyectiles cayeron en una zona de amortiguación marítima establecida entre los vecinos en virtud de un acuerdo de 2018, del que Pyongyang se retiró posteriormente.
Corea del Sur reaccionó a lo que llamó una “situación de escalada de crisis” lanzando 400 proyectiles propios al mar, en la misma zona. Según Seúl, el Norte disparó otros 60 proyectiles en la zona de amortiguamiento el sábado.
En su declaración del domingo, Kim Yo-jong, una figura importante del gobernante Partido de los Trabajadores de Corea del Norte, negó la última afirmación del Sur. Pyongyang “no disparó ni un solo proyectil a las aguas pertinentes” el sábado, insistió.
«Llevamos a cabo una operación engañosa para evaluar la capacidad real de detección de los gánsteres militares de la República de Corea», afirmó la hermana del líder norcoreano.
En lugar de disparar proyectiles, las fuerzas de Pyongyang estaban «detonando pólvora simulando el sonido de la artillería costera de 130 mm 60 veces» para ver cómo reaccionaría Seúl, añadió.
Kim Yo-jong dijo que debido a su “histeria” y “arrogancia” el ejército surcoreano “no tuvo más remedio que tragarse el anzuelo que lanzamos” y demostrar su incompetencia. Recordó un dicho que decía que “el cobarde tiene miedo de su propia sombra”.
La hermana del líder norcoreano dijo sentirse “muy lamentable” por los ciudadanos de Corea del Sur, que confiaron su seguridad a “gente ciega”.
Advirtió a Seúl contra “errores de juicio” similares en el futuro, argumentando que el Sur está provocando “desgracias irreparables” con su conducta.
«Permítanme dejarlo claro: se han levantado los seguros de los gatillos de nuestro ejército… Si hay incluso una ligera provocación, nuestro ejército lanzará inmediatamente un bautismo de fuego» para Corea del Sur, afirmó Kim Yo-jong.
La actual ronda de escalada entre Pyongyang y Seúl se produjo tras ejercicios con fuego real realizados por unidades mecanizadas de Estados Unidos y Corea del Sur cerca de la frontera con el Norte, poco antes del Año Nuevo. Pyongyang calificó el ejercicio de “maniobras de guerra imprudentes” y prometió tomar contramedidas.
