Previo a la adopción de estas medidas, la economía requirió una política monetaria restrictiva, desde finales del año 2021, para limitar la inflación generada por la marcada recuperación de la economía mundial post covid, la cual fue exacerbada por el alza de los precios de materias primas, alimentos y combustibles causada por la invasión bélica de Rusia a Ucrania. A estos fines, el BCRD aumentó paulatinamente la tasa de política monetaria de 3.0% a 8.5% en menos de un año, contribuyendo así a la disminución de inflación mas efectiva en la región.
La política monetaria restrictiva, conjuntamente con la aplicación de un política fiscal también enfocada en reducir el impacto de la inflación, permitieron una reducción gradual de la inflación hasta el nivel que tiene como meta del Banco Central y, por tanto, ahora las autoridades tienen la habilidad de cambiar hacia una política expansiva que permita una aceleración del nivel de crecimiento económico.
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