Poco antes de las 22 horas, un hombre con un cuchillo atacó a los espectadores del Festival de la Diversidad, dedicado al 650 aniversario de la ciudad. Tres personas murieron en el ataque y otras ocho resultaron heridas, cuatro de ellas de gravedad, mientras que el autor del ataque logró huir del lugar en medio del pánico.

Durante una conferencia de prensa el sábado, Markus Caspers, de la sección antiterrorista de la fiscalía, dijo que el atacante aún no ha sido localizado y que la búsqueda continúa.

El motivo exacto de la agresión sigue sin estar claro, pero los investigadores no descartan un “delito de motivación terrorista” debido a que las víctimas “no estaban relacionadas entre sí”, subrayó.

Caspers también confirmó informes de prensa previos de que un adolescente había sido arrestado en relación con un apuñalamiento. Sin embargo, enfatizó que esta persona, un joven de 15 años, no era el sospechoso.

Según el fiscal, se cree que el joven sabía del ataque planeado pero no informó a las autoridades. Dos testigos mujeres afirmaron haberlo oído hablar con otra persona y discutir acciones violentas similares a las que ocurrieron después, dijo.

Thorsten Fleiss, de la policía alemana, quien era el jefe de operaciones el viernes por la noche, dijo a los periodistas que los oficiales estaban realizando búsquedas y otras actividades de investigación en todo el estado occidental de Renania del Norte-Westfalia, donde se encuentra Solingen.

Tras el ataque, la policía encontró “varios cuchillos” no muy lejos del lugar de los hechos y estaba investigando si alguno de ellos había sido utilizado en el apuñalamiento, dijo.
Los investigadores tampoco tienen imágenes de vídeo del autor, añadió el agente, que pidió al público que comparta cualquier información sobre el ataque con las fuerzas del orden en lugar de publicarla en las redes sociales.

“ Es un gran desafío reunir las pruebas y las declaraciones de los testigos y generar un panorama general” de lo que ocurrió durante el Festival de la Diversidad, dijo Fleiss.

El canciller alemán Olaf Scholz calificó el ataque como un “acontecimiento terrible” en una publicación en X (antes Twitter) el sábado. “El autor debe ser capturado rápidamente y castigado con todo el peso de la ley”, dijo.

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A principios de este mes, la ministra del Interior alemana, Nancy Faeser, pidió la prohibición de llevar cuchillos con una hoja de más de seis centímetros (casi 2,4 pulgadas) en público, como medida para hacer frente al aumento de los ataques con arma blanca en el país.